En un viaje tan largo con tan pocos días y tanto que ver resulta muy difícil seleccionar a qué dedicarle tiempo. Tiene que estar muy justificado en tu cabeza y en cierto caso, emocionalmente, el lugar que escoges.
Este es el caso de la Gran Barrera de Coral.
Ante el blanqueamiento masivo de corales a nivel mundial queríamos poder verla antes del riesgo de que desapareciera o se destruyera. Patrimonio de la humanidad desde 1981 la Gran Barrera de Coral es un conjunto gigante de corales con varios miles de años de antigüedad que abarca una longitud más grande que Japón y acompaña toda la costa del estado de Queensland – desde el cabo York al noreste hasta casi Fraser Island al norte de Brisbane (¡y hasta se puede ver desde el espacio!). La diferencia de temperatura del agua desde ambos extremos puede oscilar entre 5/6 grados.
El conjunto coralino es una barrera que hace de protector natural de la costa de Queensland y se encuentra metida mar adentro. La barrera está en lo alto de la continuación de la cordillera que se encuentra en la costa nororiental de Australia, pudiendo emerger parte de ella a la superficie con la marea baja.
Antes de planificar el viaje creía que la barrera se encontraría algo más cerca de la costa pero al investigar las posibles excursiones pude comprobar que estaba entre una hora y dos horas en barco rápido. Las horas de viaje varían si vas a visitar un arrecife localizado más en el interior o en el exterior. Hay que tener en cuenta que solo para cruzar esta inmensa maravilla tienes que pasar en un barco una hora a su máxima velocidad.
Cairns es más conocido por ser la puerta de entrada o el lugar con más fácil acceso a la Gran Barrera de Coral, y de ahí que el viaje solo por ver este patrimonio mundial merezca la pena. Hay gran cantidad de tour operadores y tienes muchas opciones para elegir, desde visita en avión a la isla Lizard sobrevolando una parte de la barrera, viaje en helicóptero (que me han comentado que merece mucho la pena si el dinero no es problema), dormir mar adentro unos días (de esta manera te ahorras varios viajes) y, la más asequible, excursión del día entero en barco a algunos puntos de un arrecife en concreto.
Norman, Saxon y Hastings
Cerca de Cairns podemos encontrarnos con los arrecifes de Norman, Saxon y Hastings, nombrados así por el explorador James Cook en honor a la batalla de Hastings del año 1066 donde los Normandos derrotaron a los Sajones (año de la última invasión de las islas británicas que se conoce hasta la fecha). Son los arrecifes que quedan a una distancia prudente en barco desde la ciudad costera.
El tour lo realizamos con Reef Experience – un turoperador recomendado por el hotel donde nos alojábamos. Tengo que decir que estaban muy bien organizados y con una tripulación con gran experiencia en este tipo de viajes.
Te recogen a las 7 de la mañana para partir sobre las 8:30 del puerto. No estaba masificado. Quizá porque era invierno austral o porque el país lo acababan de abrir hacía poco tiempo. Uno de los comentarios más habituales que había escuchado era la masificación de este tipo de tours pero esa no fue mi impresión.
La travesía la realizamos en un barco mediano de unos tres pisos aproximadamente. En el trayecto nos fueron informando sobre los peligros, la biología y los cuidados de la Gran Barrera de Coral. Una de los puntos fuertes es que te ofrecen la posibilidad de bucear con bombona sin ninguna experiencia (bajando a 8-10 metros). Ese fue mi caso. Realicé el bautismo en un lugar inigualable. Eso sí. Toman todas las precauciones para descartar el menor atisbo de riesgo y si tienes algún impedimento que pueda presentar algún problema no te dejan realizar siquiera la prueba. Y si no pasas la prueba tampoco te dejan. Ésta consiste en que a un metro de profundidad puedas sacarte agua de las gafas y sacarte y volver a colocarte el tubo de respiración.
Bautizo en la Gran Barrera de Coral
Es una gran experiencia que recomiendo a todo el que se atreva y no se me ocurre mejor lugar para empezar que éste (sobre todo por la seguridad que te ofrece un país como Australia).
Uno de los puntos fuertes de la excursión era que llevábamos a bordo a una bióloga marina que nos profundizó un poco más en las maravillas marinas que nos podíamos encontrar en la barrera y nos contó algo más del proceso de blanqueamiento.
Blanqueamiento a nivel global
Este proceso está ocurriendo a nivel global en todos los países con corales en el mundo, y de hecho, hay una serie en Netflix muy interesante que profundiza en este aspecto. La premisa es que debido al aumento de temperatura de los océanos, los corales más sensibles a cambios en la temperatura están desapareciendo por lo que solo queda del coral el continente (su aspecto físico), que es blanco en mayor grado. Es decir, a simple vista los corales con colores son aquellos que están vivos y que han ido menguando a pasos agigantados en los últimos 10-20 años. Por poner un ejemplo, en 2016, más de la mitad de los corales de aguas poco profundas murieron en la región norte de la Gran Barrera de Coral, habiendo procesos de blanqueamiento también en 2017 y 2020. Al final, solo los corales más fuertes y adaptados al medio serán los que sobrevivan a este proceso de calentamiento global.
Flora y Fauna
La Gran Barrera de Coral tiene una gran flora y fauna. Se pueden observar cantidad de seres vivos, desde los propios corales multicolores (soft corals), pepinos de mar (sea cucumber), gusano árbol de Navidad (Christmas tree worms) los peces loro (parrot fish), pez Napoleón (Maori Wrasse), hasta 6 tipos de tortugas principales (planas –flatback-, laúd –leatherback -, verdes – green), tiburones (white tip reef, back tip reef), anemonas de mar y pez cirujano azul (tang), entre otros.
Un lugar mágico.